La Selección Española Sub-18 de Fútbol Sala concluyó ayer su concentración en Castellón cayendo derrotada por 1-5 ante Rusia en Benicàssim. La afición volvió a disfrutar con el juego de los de Fede Vidal, aunque en esta ocasión no pudo celebrar una victoria como la del pasado martes en Segorbe.
El Pabellón de Benicàssim vivió ayer el segundo de los choques amistosos con Rusia dentro del ‘stage’ que la Real Federación Española de Fútbol preparó para la Selección Sub-18 de fútbol sala. Rusia aprendió la lección tras la derrota por 5-2 en su primer duelo amistoso con España, y desde el inicio del encuentro planteó un ritmo rápido con jugadores pequeños que, si bien no podían competir con el físico de los españoles, al menos los superaban en velocidad. Así, al minuto 6, Maxim Okulov aprovechó un despiste defensivo para abrir el electrónico ante una España que lo intentó una y otra vez sin suerte en una primera parte de gran igualdad en el juego y que finalizó con la ventaja mínima para los de Sergey Skorovich. Tras el paso por vestuarios, la maquinaria rusa comenzó a funcionar sobre la pista y dos goles de Danil Samusenko y otro doblete de Ilia Federov disparaban la diferencia ante España, con Antonio Pérez anotando en el tramo final del encuentro el solitario gol del honor para los de Federico Vidal.
Durante cuatro días Castellón ha albergado la concentración de los españoles en lo que el seleccionador nacional definió como un buen ‘banco de pruebas’ de cara al próximo verano, cosechando una victoria y una derrota ante Rusia.
Autor: Prensa FFCV