Francesc Bañó dijo adiós al arbitraje el pasado 1 de diciembre en Vila-real, rodeado de su familia, de sus amigos y con un merecido pasillo de honor.
Se enfrentaban en la Ciudad Deportiva de Miralcamp el Villarreal CF C y el CD Soneja (4-1), de Tercera RFEF. Ese fue el último partido de Bañó tras 11 años dirigiendo en esta categoría y 16 como árbitro.
Desde los 17 años, el árbitro valenciano ha visitado cada fin de semana los campos de la Comunitat, desde su etapa formativa en la base (de 2006 a 2008), pasando por las antiguas Segona Regional (de 2008 a 2009), Primera Regional (de 2009 a 2011), Regional Preferent (de 2011 a 2012) y la Tercera Federación (de 2012 a 2024).
«Tengo un sentimiento de alegría y de agradecimiento, y a la vez de tristeza porque nunca se deja de ser árbitro«, señala emocionado a la cámara de la FFCV.
«Me siento un privilegiado. Cierro un círculo. Le recomiendo a cualquier joven que sea árbitro. Engancha, aporta seguridad y ayuda a la toma de decisiones en la vida«, añade.
Su esposa, sus hijos, su padre, sus amigos… Nadie quiso perderse el último partido de Francesc en Vila-real. Los abrazos y el pasillo de honor que de manera espontánea le hicieron los jugadores de ambos conjuntos fueron el mejor reflejo de su exitosa carrera. ¡Enhorabuena, Bañó!